Quo vadis, AVT?

Los actos en el octavo aniversario de la masacre del 11-M han profundizado todavía más, si cabe, la separación y el enfrentamiento entre las asociaciones AVT de Ángeles Pedraza y la de afectados por el 11-M de Pilar Manjón, acompañadas la una por dirigentes del PP y UPyD y la otra por socialistas, comunistas y sindicalistas varios. Todo esto en el marco de una campaña de cuestación emprendida por la AVT en la que la asociación presidida por Ángeles Pedraza aseguraba que carecía de fondos suficientes para continuar con las campañas judiciales en marcha y con la atención especializada para sus miembros.

Sin embargo, la actualidad se centra en el presidente de Voces Contra el Terrorismo, Francisco José Alcaraz, quien declaró el lunes 12 en Radio Inter que dicha información no es cierta: la AVT, según su antiguo responsable, sí debería disponer de fondos suficientes para seguir con la campaña jurídica contra el terrorismo así como para asegurar los distintos tratamientos a las víctimas del terrorismo. Siguiendo con las palabras de Alcaraz, la AVT tenía en sus cuentas hace tan solo tres años un millón seiscientos mil euros y, según informaciones del propio presidente de VCT, los gastos en la asociación de Pedraza han disminuido en un 50% así como el personal contratado por dicha asociación.

Si tal falsedad sobre la ausencia de fondos es cierta, sería un hecho gravísimo, tratándose de quien se trata y de la campaña que han emprendido para recibir donativos, generosos o no, del conjunto de los españoles. ¿Cuál sería el motivo que les habría llevado a representar un estado de necesidad en las calles? ¿Por qué la campaña de financiación? ¿Qué se busca, qué se pretende? Por otro lado, si es cierto que la AVT no dispone actualmente de fondos, ¿cómo ha sido la gestión de esos dineros? ¿En qué se han gastado más de un millón y medio de euros? ¿Dónde están las cuentas de la AVT y quién las revisa?

En la interesante entrevista hecha por Mundo Noticias Inter a Francisco José Alcaraz, éste puso el dedo sobre una llaga muy de actualidad: aseguraba que se debía poner fin a la cultura de la
subvención para distintas asociaciones, fueran sindicatos o, el tema que nos ocupa, asociaciones de víctimas. Muy acertado ha estado el presidente de VCT: esa nula dependencia del poder político, que al fin y al cabo es quien concede o no las subvenciones, otorga una libertad de
acción y de crítica absolutamente fundamental en una pieza tan clave en la lucha contra el terrorismo como son las víctimas. El criterio de las víctimas ha de ser tenido en cuenta y ese criterio debe de ser incuestionable por su honradez. El pancismo o la opacidad en las cuentas dejarán, al menos, una sombra de sospecha en el pilar fundamental de esta cruzada contra el terror. Y, aunque sólo fuese por eso, sería inaceptable.

Las asociaciones de víctimas, por el puesto que ocupan en la resistencia frente al crimen organizado terrorista, deben de estar libres de toda mancha, libres de toda sospecha, asegurando así una tribuna franca desde la que criticar al poder en sus decisiones erróneas o alabarlo en sus decisiones correctas, independientemente de las siglas que dicho poder ostente y de las subvenciones que por motivo de la cultura del subsidio dichas siglas otorguen. Por otra parte, las asociaciones de víctimas, además, por su posición de fuerza moral, deben ser ejemplo de transparencia y de gestión, también para favorecer que su voz sea escuchada por respetada, y
sea respetada por ejemplo de honradez y claridad.

Desde Cruzando el Rubicón no queremos entrar en un linchamiento mediático contra ninguna víctima del terrorismo pues nos parecería de todo punto injusto. Sin embargo hay algunas preguntas que, por honradez, no podemos dejar de formular. Por ejemplo, ¿dónde queda esa posición de fuerza cuando las cuentas no estás claras o cuando los datos son confusos o falsos? ¿Qué precio se le puede poner a ocupar ese puesto clave en la lucha contra el terror? ¿No se podría llegar a interpretar que ese mercadeo sólo es la venta o el alquiler de la dignidad de las víctimas o de la memoria de los muertos? Esperemos que todas estas dudas y estas sospechas se vean aclaradas cuanto antes.

Cruzando el Rubicón